El balastro o reactancia, además de ayudar al encendido, se encarga de limitar la corriente en el proceso de descarga. Para el moderno funcionamiento de las lámparas fluorescentes, nos ofrecen una alta eficiencia, larga duración, luz confortable y uniforme basada en la reducción de la pérdida de potencia y el aumento de la eficacia luminosa.
Además, las lámparas fluorescentes van a arrancar sin destellos y van a proporcionar una luz estable sin ruido y sin parpadeo (sin efecto estroboscópico). Otras ventajas adicionales pueden ser, la desconexión automática de las lámparas defectuosas o la desconexión temporal contra sobretensiones de la red y un aumento del 50% de la vida de la lámpara.