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La Señora Mr. Weed Mass nos revela su esencia más refinada en su mismo nombre: dulce. Y es que, efectivamente, es una genética repleta de matices y fragancias edulcoradas que la convierten en un deleite para los fumadores más exigentes y amantes de los aromas refrescantes. A pesar de predominar en su genoma el parental sativa (65%), llama la atención su cortísimo periodo de floración ya que se suele cosechar a partir de los 55 días, y en 60 si prefieres flores bien maduras. En exterior podemos cosechar a partir de finales de septiembre. Sin ser una de las genéticas más productivas de Mr.Hide Seeds®, Mr. Weed Mass nos puede regalar fácilmente más de 500 gramos por metro cuadrado en interior, lo cual la convierte en una mata de producción altamente generosa. Es una planta bella, de porte elegante, con una estructura en la que a pesar de predominar un súper cogollo central, son muchas las ramas laterales que nos proporcionan cogollos igualmente espectaculares y repletos de blancos cristales repletos de resina. Por este motivo, si procedemos a curarla durante unas pocas semanas, los cogollos se ponen duros como piedras haciendo imprescindible el uso del grinder para desmenuzarlos. De hecho, la manicura de esta planta es un trabajo arduo, debido al pringue de tantísima resina que se queda adherida entre los dedos y palmas de las manos. Por este motivo es aconsejable ayudarnos de un cúter para retirar de las manos toda la resina acumulada y disfrutar así de un “charas” auténticamente delicioso. Llama la atención su efecto altamente cerebral, propio de su herencia sativa, pero en perfecta armonía con una contundente relajación muscular y mental que hace de esta variedad una de las más apreciadas por usuarios de cannabis medicinal y aquellos que buscan una genética que les permita su uso diario sin que ello afecte a su rendimiento personal y laboral. Quizás sea el sustantivo optimismo la palabra que mejor define el efecto de nuestra Mr. Weed Mass. Optimismo y una sensación de júbilo vital realmente exclusivo. Cabría destacar que el colocón es bastante duradero, hasta dos horas, alcanzando su pico más alto hacia los veinte minutos después de su consumo. Y para ser honestos también tenemos que advertir de que al final del “viaje” tiende a despertar un apetito voraz. Quizás no sea la variedad más aconsejable para aquellos que estén siguiendo una dieta estricta. Fácil de cultivar y muy adaptable a distintas condiciones medioambientales. Resistente a plagas y hongos como pocas, y de hecho, tras un buen cultivo, los cogollos tienden a segregar tanta resina que desafían la humedad sin desarrollar hongos. Aunque sus efluvios almibarados destacan en cualquier tipo de cultivo, es en tierra y de forma orgánica donde más destaca su esencia única.
